En la pasada Copa América que ganó la selección Argentina con Lionel Messi a la cabeza, se produjo un hecho relevante relacionado con las retransmisiones deportivas, y que puede haberse convertido un auténtico punto de inflexión global, si se analiza en profundidad.
Los derechos de retransmisión del evento deportivo fueron adquiridos por Kosmos Studios, la empresa fundada por Gerard Piqué, cuyo director es Oriol Querol, protagonista de esta entrevista.
En España, los partidos del más antiguo certamen de selecciones no fue emitido por cadenas de TV, sino por Twitch, la plataforma de streaming mundialmente famosa. Los encuentros no fueron narrados por los relatores o periodistas reconocidos de España, sino por el streamer más popular: Ibai Llanos.
¿Estamos ante un nuevo paradigma?
Entrevisté al director de Kosmos Studios, Oriol Querol, un experimentado productor audiovisual que trabajó en la Cadena SER pero luego se dedicó al mundo audivisual y fue parte de exitosos proyectos en TV, un creativo que tanto puede escribir guiones para documentales o largos reportajes, así como producirlos. En 2020 se sumó a la empresa fundada por Gerard Piqué.
En la entrevista, el ejecutivo narró cómo se llegó a un acuerdo con el streamer Ibai Llanos, pero lo curioso resultó en la oportunidad que casi sin proponérselo, la empresa Kosmos Studios logró. La Eurocopa concentró la atención de las canales de TV, y como el evento coincidió con la Copa América, ninguna cadena de TV se mostró interesada en adquirir los derechos que la Conmebol latinoamericana ofrecía. Allí surgió la chance experimental para Kosmos que decidió comprar los derechos.
El 50% de la enorme audiencia de Ibai Llanos es de América Latina; son recordados sus encuentros con el Kun Agüero para jugar videojuegos, y el trabajo que el streamer venía realizando desde hacía 7 años en la industria de los e-sports. Con estos antecedentes se llegó a la reunión entre Kosmos y el streamer para acordar que los partidos de la Copa América serían vistos en España de manera totalmente gratuita, pero a través de Twitch.
Oriol Querol reconoce en la entrevista que el éxito superó las expectativas, y de ahí en más surgió una gran oportunidad, pues la empresa que dirige ya acordó que los partidos de Copa Davis serán comentados y emitidos en el canal de Ibai, y en los últimos días se agregó que el streamer comenta los encuentros olímpicos de la selección de baloncesto de España. El fenómeno Ibai se impone por encima de los formatos tradicionales.
¿Es sostenible este modelo de streamers sin empresas de medios?
El fenómeno de los streamers tiene varios años, pero recién hace dos años que el mercado de ha «popularizado» y hoy los medios hablan de Twitch, de los e-sports y de términos que ya tienen más de 12 años, solo que no habían sido descubiertos por públicos más amplios.
En la entrevista, Oriol Querol admite que las formas de hacer TV o radio, nada tienen que ver con lo que ofrecen los streamers. Menciona como ejemplo que es inimaginable que un canal de Tv pueda emitir 5 horas en vivo de un joven jugando un videojuego en red, soltando comentarios mientras miles de jóvenes ven cómo juega. O en la radio, lo usual es que una entrevista tenga un hilo conductor, un tiempo delimitado, mientras que Ibai Llanos puede conversar por más de 2 horas con un invitado sin un orden, sin guión y entrar y salir de los temas… algo que para el oído habituado a la radio lineal sería muy difícil de seguir.
Lo cierto es que los streamers, los podcasters, los influencer son una nueva categoría de comunicación que compite en la misma línea de los periodistas, los animadores, locutores o presentadores de radio o TV. Las plataformas se modifican, pues mientras las audiencias jóvenes consumen Tik Tok, Instagram y Twitch, su dedicación a la TV o la radio es una práctica casi desechada, porque el smartphone es el centro de la conexión.
Es prematuro decir que los medios se ven perjudicados por estos formatos de consumo, como lo es decir que el podcast o Clubhouse acabará con la radio. Los medios lineales pierden efectividad ante la nueva demanda del consumidor, mucho más conectado e identificado con los medios sociales. Quizá ahí radique parte de los cambios que las marcas de medios deben entender: abrir más el concepto social, participativo, democrático, dispuesto a experimentar con los Ibai Llanos que tienen lenguajes diferentes pero efectivos para llegar a la gente.